¿Cuándo debo comprar un estabilizador de voltaje? Esta es una de las preguntas que se hacen propietarios cuando viven en una zona o región donde la red eléctrica es inestable. Sin embargo, no hay que esperar a que se dañen parcial o totalmente sus electrodomésticos y se pierda la inversión hecha en casa: siempre es tiempo de protegerlos. ¿Cuál es la mejor manera de hacerlo? Con un estabilizador de voltaje o también llamado regulador de voltaje. Así funciona y esto es lo que debe saber antes de comprarlo.
Para comenzar, hay que recordar que existe un voltaje estable promedio que representa la cantidad de energía que entrega la fuente de manera constante. Se calcula utilizando un voltímetro para medir los valores instantáneos del voltaje en un período de tiempo determinado.
En un sistema eléctrico ideal, el voltaje debería ser perfectamente estable, no obstante en la práctica fluctúa, lo que representa uno de los problemas más comunes en zonas donde no se garantiza un servicio estable. ¿De qué manera se presentan estos cambios y por qué se dañan los equipos en casa?
Una de las condiciones más comunes son los llamados picos de voltaje (alto voltaje momentáneo o surge, en inglés), y se presenta con un aumento abrupto y de corta duración del voltaje, que puede durar desde microsegundos hasta milisegundos. De igual manera puede presentarse un hundimiento del voltaje (bajo voltaje momentáneo o sag).
Las causas más frecuentes de estas dos situaciones son las descargas atmosféricas o rayos; también están los fallos de la red eléctrica que pueden producir cortocircuitos, daños en equipos o interrupciones y cortes en el suministro eléctrico.
Ahora bien, cuando no es transitorio o momentáneo, sino que se prolonga en el tiempo, se producen otras condiciones como el sobre voltaje sostenido (overvoltage), y dura desde unos segundos hasta varias horas, lo que tiene un impacto significativo en los equipos eléctricos, e incluso puede provocar incendios. Cuando cae por debajo del nivel nominal esperado se presenta un bajo voltaje sostenido (undervoltage). En ambos casos también se disminuye la vida útil de los equipos o el bajo rendimiento de los mismos.
Otras de las condiciones son los ruidos eléctricos (line noise), consideradas como perturbaciones no deseadas de una señal eléctrica y ocurren por causas naturales como actividad solar, descargas atmosféricas, entre otros fenómenos. También por la mala conexión a tierra, entre otras causas.
Y por último, no menos importante, no hay que descartar la distorsión armónica (harmonic distorsion) que cuando son continuos e importantes, generan sobrecalentamiento y fallos de cables y equipos, pérdida de eficiencia de motores y transformadores o interrupciones en sistemas de comunicación y señales.
Para todas estas situaciones es importante pensar en una solución sencilla y accesible como un estabilizador o regulador de voltaje.
Un estabilizador cuenta con sensores que miden el voltaje de entrada de la compañía que presta el servicio de energía. Esta información se envía de forma permanente a un circuito de control, y tras un análisis, se determina cuál debe ser el voltaje de salida. Con ello se ajusta para garantizar el objetivo final que es mantener el voltaje estable.
“Aunque son más lentos (que un sistema ininterrumpido o UPS) y la cantidad de energía que puede regular es más pequeña”, explica el ingeniero Eduardo Abraham, de Industronic, resultan ser muy útiles en casa para equipos que no tengan una misión crítica como electrodomésticos, y que si dejan de funcionar, no paran procesos sensibles.
Si bien los hay de diferentes tamaños es importante revisar el espacio donde van a operar. Es necesario estudiar las dimensiones y ubicarlo de la mejor manera para protegerlo. Se recomienda hacerle un mantenimiento anual para calibrarlo y revisar que no haya acumulación de polvo o contaminantes y así prolongar su vida útil.
Completamente. Como su nombre lo indica son equipos diseñados para estabilizar el voltaje. Añaden una capa de seguridad y salvaguardan la inversión que ha hecho en casa al comprar, en algunos casos, costosos equipos como televisores, neveras o computadores. Además le evitan dolores de cabeza con innecesarias reparaciones por mal funcionamiento o problemas como reinicios continuos o desconfiguraciones para lo que necesita llamar a un técnico.
“Va a depender del tipo de la carga y del proceso, si es crítico o no”, dice Héctor Mondragón, ingeniero del Grupo Industronic. Explica que en zonas en las que el proveedor del servicio de energía es deficiente, con altas ocurrencias en interrupciones y daños en maquinaria, es posible contar con soluciones combinadas. Por ejemplo, utilizar un regulador o estabilizador para servicios como el aire acondicionado, un compresor o un ascensor. En este caso, “la duración en el corte de energía no les va a impactar”, agrega.
En cambio, otro tipo de equipos sensibles o electrónicos; o un proceso crítico o esencial del negocio no puede tener interrupciones o pueden dañarse con un cambio brusco de voltaje. En este caso, es importante estabilizar el voltaje pero más importante evitar las pérdidas económicas por la suspensión de energía que involucran desde daños en componentes como tarjetas, hasta fallos en la entrega de productos al cliente final.
Los UPS necesitan mantenimiento anual, pero a diferencia de un regulador no necesitan calibrarse.
Adquirir un estabilizador de voltaje o un regulador no es una compra innecesaria, al contrario, es una inversión para proteger la dispositivos en casa. La mejor manera de escoger el adecuado es dimensionar la capacidad en términos de potencia y para ello, Grupo Industronic cuenta con una línea de reguladores adecuados según la necesidad.